Hemos visto miles de árboles en nuestra vida, pero seguramente nunca hemos visto a un árbol de la manera que Aidan Dwyer lo hizo. Este joven de 13 años, al observar las ramas de unos árboles, se percató que la secuencia de Fibonacci era responsable del patrón de las ramas. Quizás este descubrimiento puede ser un tanto obvio ya que la secuencia de Fibonacci se encuentra ampliamente en la naturaleza (como lo podemos ver en colmenas, flores, plantas, caracoles, etc.), pero lo más importante es que Aidan se hizo a si mismo la siguiente pregunta: ¿por qué?
Su hipótesis fue que los árboles emplean esta secuencia para recolectar más luz solar en el proceso de fotosíntesis y, para demostrarlo, creó dos modelos de celdas solares: el primero siguiendo el arreglo tradicional de configuración plana y el segundo la secuencia de Fibonacci.
El resultado del segundo modelo fue impresionante:
“El diseño del árbol creó 20% más electricidad y recolectó 2 ½ más horas de luz solar durante el día. Pero los resultados más interesantes fueron en Diciembre, cuando el Sol estaba en su punto más bajo en el cielo. El diseño del árbol creó 50% más electricidad, y el tiempo de recolección de luz solar fue 50% más largo.” (http://www.amnh.org/nationalcenter/youngnaturalistawards/2011/aidan.html)
Cuando noticias de su experimento salieron a la luz muchos lo proclamaron como un genio y alabaron su idea revolucionaria mientras que el escepticismo llevó a otros a cuestionar su trabajo en un furor de comentarios y artículos de Internet. Lamentablemente, al poco tiempo se descubrió que Aidan había cometido un error al haber registrado el voltaje en lugar de haber calculado la potencia eléctrica. Una falla muy seria en su experimento.
Pese a la crítica, la comunidad científica ha elogiado la curiosidad innovadora de Aidan con el prestigioso premio Young Naturalist del American Museum of Natural History, con una patente y marca registrada de su «árbol solar» y como el presentador más joven en la conferencia PopTech 2011.
Bien dice el Sultán Ahmed Al Jaber, que invitó a Aidan como orador en el World Future Energy Summit en Abu Dhabi, “nuestro mandato es la búsqueda de grandes mentes, talentos e innovaciones tecnológicas en todo el mundo […] Necesitamos miles de Aidans para ayudar a transformar la manera en que producimos y consumimos energía”.
Quizás fue todo este apoyo el que llevó a Aidan a crear un nuevo modelo del árbol solar en el cual esta vez midió correctamente la potencia eléctrica y que dice ser mejor que el panel tradicional y que cambiará al mundo.
We have seen thousands of trees in our lifetime, but we haven´t seen them the way Aidan Dwyer did. This young man, while watching tree branches, noticed that the Fibonacci sequence was responsible for the branches pattern. Maybe this discovery is a bit obvious seeing as the Fibonacci sequence is widely present in nature (i.e. beehives, flowers, plants, seashells, etc.), but what pushed his idea even further was that he asked himself the next question: Why?
His hypothesis was that trees use this sequence to gather more solar energy in the photosynthesis process and, to prove it, he created two solar panel models: the first one following the traditional method on a single plane and the second following the Fibonacci sequence.
The results of the second model were impressive:
“The tree design made 20% more electricity and collected 2 1/2 more hours of sunlight during the day. But the most interesting results were in December, when the Sun was at its lowest point in the sky. The tree design made 50% more electricity, and the collection time of sunlight was up to 50% longer!» (http://www.amnh.org/nationalcenter/youngnaturalistawards/2011/aidan.html)
When news of his experiment came out, many proclaimed him as a genius and praised his innovative ideas while skepticism drove others to question his work in a frenzy of web comments and articles. Shortly after his experiment went public, it was discovered that Aidan had made a mistake in the measurement of the results by incorrectly accounting current and not power. This was a serious flaw that was not taken lightly by the media.
In spite of the criticism, the scientific community has acclaimed the innovative nature of Aidan with merits such as the prestigious Young Naturalist award from the American Museum of Natural History, a patent and trademark for his solar tree, and as the youngest presenter of the PopTech conference in 2011.
As Sultan Ahmed Al Jaber said, who invited Aidan as a speaker at the World Future Energy Summit in Abu Dhabi, “Our mandate is to look for great minds, talents, technology innovations around the world […] we need thousands of Aidans to help transform the way we produce and consume energy.»
Maybe it was all this support that led Aidan to build a new solar tree model to which he correctly measured power this time and that he said it’s still better than the traditional panel and is going to change the world.